El club, que acaba de ascender a la OK Liga, desea consolidarse de nuevo, aunque con menos recursos.
30.07.2020
El regreso del CE Vendrell a la OK Liga ha contado con una premura poco habitual después de un año dramático, con el descenso inesperado a OK Liga Plata en la 2018-19. La pandemia aceleró los plazos y devolvió a la entidad del Club d’Esports a la categoría en la que se ha comportado con cierta autoridad en la última década. Sin duda, la más exitosa de la sección, con premios de postín incluidos en la vitrina.
El Vendrell dominó su grupo de OK Liga Plata
El Vendrell dominó su grupo de OK Liga Plata casi de principio a fin. Sin sospechas. Con un plantel de jugadores asentados en el equipo y un entrenador, Lluís Del Riu, coherente en su propuesta. Del Riu aspira a convertirse en una figura similar a la de Guillem Cabestany, que en 2010 tomó las riendas de una plantilla recién ascendida y diseñó un proyecto campeón. Dos Copas del Rey (2013 y 2014) y una CERS (2013) coronaron el ciclo, también una final Four de la Liga Europea (2014), desafíos impensables para El Vendrell antes de la etapa Cabestany.
Del Riu maneja ahora una propuesta más austera en lo económico y necesitará mejorar las prestaciones del bloque del ascenso, que en casi su totalidad ha renovado su compromiso con el club. De hecho, el CE Vendrell solamente va a reforzarse con la incorporación de Roc Llisa, un atacante que en la última temporada ha saboreado la Liga italiana en el Bassano.
Sin demasiados argumentos financieros, aunque con un entusiasmo absolutamente renovado, la entidad aspira a abrir una nueva etapa que pueda asemejarse a la primera época dorada vivida en estos últimos diez años.
La influencia de Del Riu
La influencia de Del Riu en la idea que presenta el club resulta indiscutible. Cogió al Vendrell a mediados de la campaña 2018-19, hundido en la tabla de la OK Liga y sin apenas margen de error. Se quedó a un paso de la permanencia en la última fecha del campeonato. El técnico ha exhibido una capacidad deslumbrante para regenerar la energía de la sección y del equipo y lo ha devuelto con una superioridad manifiesta a la máxima categoría. El ascenso se concretó en abril por una decisión federativa, envuelta en el desastre social que ha provocado el coronavirus. Eso sí, el éxito se cosechó en la pista antes, con un Vendrell con autoridad, que ya había ganado la Copa Princesa.
Bajo el mando del incansable Víctor Romagosa, el presidente de la sección de hockey, el CE Vendrell se enfrenta a un curso exigente, aunque todavía con muchas incógnitas por resolver debido a los efectos de la pandemia, que mantienen en vilo al deporte, también al hockey patines.
Fuente: Marc Libiano, Diari de Tarragona.
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