En esta nota, el testimonio de jugadores de distintas ligas, pero con la misma responsabilidad al momento de cuidar su alimentación.
11.08.2022
"Eres lo que comes" es una de las frases más populares en el ámbito de la nutrición, en los últimos años. A través de ella se busca generar conciencia sobre la importancia de alimentarse de forma sana. No solo para cuidar la figura sino, sobre todo, para cuidar la salud. Pero hay un motivo más, y es que también es importante alimentarnos a conciencia si somos deportistas de élite. Porque los nutrientes, vitaminas, minerales, fibras y todo lo que consumimos al momento de comer tiene su efecto al momento de exigir físicamente al cuerpo.
Esto es cada vez más comprendido y aplicado en el mundo del hockey sobre patines. Cada vez más equipos cuentan con un nutricionista en su staff y, además, cada vez más jugadores, individualmente, se asesoran al momento de qué, cómo y cuándo comer. "Trato de cuidarme lo más posible con las comidas. No tengo una nutricionista personal. Hay jugadores que dicen que no les influye, no es mi caso, creo firmemente que un nutricionista es tan fundamental como un preparador físico", reconoce Franco Ceschin, reciente incorporación el Alcoi.
El hockey sobre patines se ha tornado cada vez más físico, y la técnica parece solo definir partidos, pero no campeonatos, donde el equipo ganador tendrá, indefectiblemente, una buena preparación física y nutricional. Así lo cree Nahuel Castro, jugador del Juventude de Viana: "Hoy en día, los jugadores son mucho más físicos, por eso es importante cuidarse para estar a nivel".
Claro que las selecciones son los primeros equipos que entienden la importancia de un nutricionista. Es el caso del Sub19 de Argentina, donde juega Giuliano Giuliani, que dice que "En estos momentos estamos trabajando con la nutricionista de la selección argentina Sub 19. Cuidamos muy bien nuestra alimentación para llegar al 100% al mundial".
No hay mal que por bien no venga
Es una frase que le resultó a Arnau Dilmé, jugador andorrano del Wolfurt austríaco. A partir de su condición de celíaco, aprendió a comer mejor y, así, obtuvo mejores rendimientos en el hockey. "Yo soy celíaco, y eso me ha obligado a ir al nutricionista para que me haga algunos menúes porque sufría un poco. Es evidente que una buena nutrición siempre ayuda al rendimiento deportivo, laboral y de vida. Si comes bien, está claro, todo va mejor, el cuerpo se siente mejor y te sientes con más energía".
En definitiva, el tema es mucho más fácil de entender con una analogía, como la que nos deja Jero García de Sandrigo: "Al vehículo hay que darle un buen combustible, si no el motor en cualquier momento se rompe".
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